No fragmento do romance mexicano, publicado em
1989, prevalece a
Dicen que Tita era tan sensible que desde que
estaba en el vientre de mi bisabuela lloraba y lloraba
cuando ésta picaba cebolla; su llanto era tan fuerte que
Nacha, la cocinera de la casa, que era medio sorda, lo
escuchaba sin esforzarse. Un día los sollozos fueron tan
fuertes que provocaron que el parto se adelantara. Y sin
que mi bisabuela pudiera decir ni pío, Tita arribó a este
mundo prematuramente, sobre la mesa de la cocina,
entre los olores de una sopa de fideos que estaba
cocinando, los del tomillo, el laurel, el cilantro, el de la
leche hervida, el de los ajos y, por supuesto, el de la
cebolla. Como se imaginarán, la consabida nalgada no
fue necesaria, pues Tita nació llorando de antemano, tal
vez porque ella sabía que su oráculo determinaba que
en esta vida le estaba negado el matrimonio. Contaba
Nacha que Tita fue literalmente empujada a este mundo
por un torrente impresionante de lágrimas que se
desbordaron sobre la mesa y el piso de la cocina.
ESQUIVEL, L. Como agua para chocolate.
Buenos Aires: Debolsillo, 2005.
Dicen que Tita era tan sensible que desde que estaba en el vientre de mi bisabuela lloraba y lloraba cuando ésta picaba cebolla; su llanto era tan fuerte que Nacha, la cocinera de la casa, que era medio sorda, lo escuchaba sin esforzarse. Un día los sollozos fueron tan fuertes que provocaron que el parto se adelantara. Y sin que mi bisabuela pudiera decir ni pío, Tita arribó a este mundo prematuramente, sobre la mesa de la cocina, entre los olores de una sopa de fideos que estaba cocinando, los del tomillo, el laurel, el cilantro, el de la leche hervida, el de los ajos y, por supuesto, el de la cebolla. Como se imaginarán, la consabida nalgada no fue necesaria, pues Tita nació llorando de antemano, tal vez porque ella sabía que su oráculo determinaba que en esta vida le estaba negado el matrimonio. Contaba Nacha que Tita fue literalmente empujada a este mundo por un torrente impresionante de lágrimas que se desbordaron sobre la mesa y el piso de la cocina.
ESQUIVEL, L. Como agua para chocolate. Buenos Aires: Debolsillo, 2005.
Gabarito comentado
A) Essa alternativa está correta, pois, de fato, o texto se apresenta em forma de narração, onde é contada a história da personagem Tita, e, nessa narração há, sim, a presença de elementos fantásticos, como, por exemplo, o oráculo citado ao final do texto.
B) Essa alternativa está errada, já que não há um relato objetivo da realidade no texto apresentado.
C) Essa alternativa está errada, pois o texto não se caracteriza como injuntivo.
D) Essa alternativa está errada, já que o texto não se caracteriza como expositivo.
E) Essa alternativa está errada, pois não podemos observar a presença de uma argumentação no texto exposto acima.
Portanto, concluímos que a resposta correta está na alternativa de letra A.
Gabarito do professor: Letra A.